Nunca intentaba fingir, pues su ley era la verdad
y solitario vivió porque al mundo no era igual.
Siempre logró comprender signos que el hombre ignoró,
y es que en la Tierra no hay la espiritual visión.
Tanto en el mundo buscó lo que no se podría hallar:
llamas eternas de amor cual perenne luz sideral.
Fuego inmortal invocó y en el desierto lo vi:
Un día al alba se fue, él tuvo que partir...
Insólito ser vivió, que a contracorriente fue.
En la multitud seguía la luz hacia la verdad que es fiel.
Insólito ser vivió, que el mundo no pudo ver.
Destino forjó, amaba la luz. Y no engañó, él fue
un extraterrestre...
Nunca intentó transformar, él buscaba en el interior
seres de fe y voluntad que se guíen por la razón.
Todo un altar restauró y en el desierto otra vez
vuelve a iniciar su misión y anuncia quién es Él.
Insólito ser vivió, que a contracorriente fue.
En la multitud seguía la luz hacia la verdad que es fiel.
Insólito ser vivió, que el mundo no pudo ver.
Destino forjó, amaba la luz. Y no engañó, él fue
un extraterrestre...
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- Adaptación lírica de «Инопланетянин» (Inoplanetyanin), interpretada por Ying-Yang